La plantación de Pimiento del Piquillo de Lodosa ya ha finalizado en las ocho localidades navarras adscritas a la Denominación de Origen: Andosilla, Azagra, Cárcar, Lerín, Lodosa, Mendavia, San Adrián y Sartaguda. A mediados de septiembre, comenzarán a recoger el fruto y terminarán previsiblemente en el mes de noviembre, cuando caiga la primera helada.
Este año, según los propios agricultores, la campaña ha sido un tanto especial. Y es que, debido a las inclemencias meteorológicas del mes de mayo, tuvieron que poner la planta de manera escalonada. Sin embargo, y a pesar de que se empezó un poco más tarde a preparar el terreno, ya está todo plantado y la tardanza no afectará en nada al resultado final. Lo importante ahora es el verano. A partir de ahora la planta necesita sol y calor para ponerse a punto de cara al mes de septiembre, que es cuando comenzará la campaña de recolección.
Aunque los agricultores todavía están a tiempo de inscribir las parcelas en el registro, los datos que barajan desde el Consejo Regulador son muy similares a los de otros años. Por ejemplo, la pasada campaña se plantaron 155 hectáreas por parte de unos 90 agricultores que entregaron su producto a 13 conserveras de la zona. En total se generaron unos 1.000 puestos de trabajo desde septiembre a noviembre.